ahora que la suerte se me puso insolente
y la felicidad me esta ofreciendo
una mano,
voy a mirar la vida de reojo
para que no se me ponga esquiva
y me retire el saludo...
ahora que la suerte
se me puso insolente
voy a sacar la luna del bolsillo
y la voy a dejar con su guitarra
a la orilla del río
donde arrojo mis penas
para que les cante la
canción del olvido
y le cuente a tus ojos
que a veces... solo a veces...
los miro sin que ellos lo noten...
Ahora que la felicidad se bajo
del autobús
en la parada del frente
sali a recibirla
y ella me traía de regalo
un trocito de tu voz
que me susurra
-aun te amo cielo-
ahora que la suerte
se me puso insolente
y la felicidad le pega
y la felicidad me esta ofreciendo
una mano,
voy a mirar la vida de reojo
para que no se me ponga esquiva
y me retire el saludo...
ahora que la suerte
se me puso insolente
voy a sacar la luna del bolsillo
y la voy a dejar con su guitarra
a la orilla del río
donde arrojo mis penas
para que les cante la
canción del olvido
y le cuente a tus ojos
que a veces... solo a veces...
los miro sin que ellos lo noten...
Ahora que la felicidad se bajo
del autobús
en la parada del frente
sali a recibirla
y ella me traía de regalo
un trocito de tu voz
que me susurra
-aun te amo cielo-
ahora que la suerte
se me puso insolente
y la felicidad le pega
coces a mi puerta...
me pregunto...
¿para qué la poesía...?
¿para qué la poesía...?
Lorenasol marzo 2013
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