Solo Tú /Paulo Setúbal

A todas las que me besaron, A todas las que me abrazaron, no las recuerdo mas... Son tantas las que me amaron, son tantas las que yo ame. Pero tú, que cruel contraste! tú, que jamas me besaste, tú a quien jamás abracé, Sólo tú en esta alma quedaste, de todas las que yo ame. “Solo Tú” /Paulo Setúbal.

5 de abril de 2013


Un buscador interroga a un maestro zen acerca de la naturaleza de la iluminación:
-Maestro, por curiosidad, ¿qué hacía usted antes de su iluminación?
-Cortaba y acarreaba leña para el fogón y traía agua del pozo -responde el maestro.
-Ahá, una vida simple y laboriosa. Y ahora que se ha iluminado, su vida debe haber cambiado mucho…, debe estar dedicado a la meditación, la oración, los viajes astrales… ¿qué es lo que hace ahora?
-Corto y acarreo leña para el fogón y traigo agua del pozo -responde imperturbable el maestro.
-Pero, maestro, no comprendo -dice el discípulo, extrañado-. ¿Acaso la iluminación no transformó su vida? Yo habría supuesto que ahora usted estaría dedicado a actividades más nobles.
-No comprendes -le responde el maestro-. Lo que cambia no es lo que haces –a menos que antes estuvieras dedicado a cosas muy ajenas a tu naturaleza-; lo que cambia es la cualidad de lo que haces.
-¿A qué se refiere con eso? -pregunta el discípulo, intentando comprender.
- Es algo muy simple, en realidad… para nada misterioso o sobrenatural. 
Antes, cuando cortaba y acarreaba leña, por ejemplo, mi mente estaba en cualquier otra parte: quizás soñando con la iluminación, quizás irritado por tener que realizar actividades tan innobles, quizás esforzándome por ser humilde y por aceptar la situación, quizás enfrascado en remordimientos o fantasías respecto a situaciones con otras personas, etcétera.
Ahora, cuando corto y acarreo leña y traigo agua del pozo, simplemente estoy ahí, en lo que estoy haciendo, y sin un propósito ulterior. No tengo deseos de estar en otra parte ni dejo que mi mente me lleve de la nariz a donde le plazca. 
Y eso -tan simple- cambia todo de raíz

No hay comentarios:

Publicar un comentario