Una casa,
cinco personas,
sin bocas,
sin ojos,
sin oídos,
sin manos...
los corazones se
arrugan,
envejecen,
de marchitan
en penas y
escasas alegrías,
una casa,
cinco personas,
todas con ojos
llenos de noches
la oscuridad
desborda
la rutina,
los gritos
y las penas
hacen ecos
que retumban en
las paredes...
cinco personas
todas con ojos
que no se miran
todas con manos frías
llenas de tormentas,
de huracanes,
de vientos y escarchas...
Cinco personas,
que no escuchan,
con oídos
llenos de decepciónes
que se escapan
por las bocas
parlantes del odio...
Cinco personas
que deambulan
como sombis
como desconocidos...
Y ya no se que más
hacer...
Lorenasol junio 2013
No hay comentarios:
Publicar un comentario